OKRs PARA STARTUPS Establece metas y mide los resultados
Hola comunidad,
En el artículo de Pedro Gil, Portfolio Manager de Bcombinator, nos hablaba de la importancia de detectar qué métricas son las más importantes para tu tipo de negocio y cómo mejorarlas. Esto no sólo es importante para afrontar una conversación con un inversor, sino para tener una foto actual de la situación de la empresa y poder tomar decisiones en base a ella. Saber cuáles son las métricas más esenciales y hacer un seguimiento de ellas es vital si queremos hablar de OKRs.
Para mejorarlos, debemos definir estrategias y acciones concretas que nos lleven a la consecución de nuestros objetivos. Ahí es donde aparecen los OKRs como la herramienta perfecta para mantener el foco en lo que realmente importa y alinear a tu equipo en una dirección única.
En este artículo, intentaré ayudarte a evitar los errores más comunes que me he encontrado implementando OKRs en 2 organizaciones muy diferentes y mostrarte lo útiles que pueden ser para tu startup.
¿Qué problemas evita el uso de OKR’s?
En el ecosistema empresarial, las startups a menudo luchan por mantenerse centradas en medio del rápido crecimiento y el cambio constante. Sin un marco estructurado de fijación de objetivos, los equipos pueden perder rápidamente la orientación, lo que lleva a proyectos que no se alinean con los objetivos estratégicos de la empresa. Esta desalineación resulta en recursos desperdiciados, oportunidades perdidas y esfuerzos dispersos, poniendo en riesgo el éxito de la startup.
Sin OKRs, tus equipos pueden establecer sus propias prioridades, creando conflictos e ineficiencias. Esta falta de cohesión obstaculiza la capacidad de tu startup para alcanzar sus objetivos. Medir el progreso se hace difícil, lo que dificulta el ajuste de estrategias y la toma de decisiones informadas. Una comunicación y colaboración deficientes fragmentan aún más la organización, reduciendo el potencial de innovación. La urgencia de implantar OKRs es clara: son esenciales para mantener la dirección, la alineación y el éxito medible en las startups.
Los OKR son una herramienta clave si quieres convertirte en un equipo de alto rendimiento.
Entender los OKRs
El error más común al implementar OKRs en su organización es hacerlo sin hacerse las preguntas correctas, y entender cuál es la cultura que tenemos que generar en la empresa para que tengamos éxito.
OKRs (Objectives and Key Results) es un marco de fijación de objetivos que ayuda a las organizaciones a definir y realizar un seguimiento de los objetivos y sus resultados.
Antes de definir los objetivos, los resultados clave y las acciones clave, es importante tener en cuenta que todo tiene que estar alineado con la visión y la misión de la organización. Así nos aseguramos de trabajar siempre en la misma dirección.
Un objetivo es una meta clara, ambiciosa y limitada en el tiempo, mientras que los resultados clave son acciones específicas y mensurables que permiten seguir su consecución. Los OKR garantizan la alineación y un enfoque unificado hacia los objetivos estratégicos.
- Objetivos: En las startups, los objetivos son una declaración cualitativa para proporcionar una dirección clara e inspiración, respondiendo a “¿Qué queremos conseguir?”.
- Resultados Clave: Son resultados cuantitativos y medibles, desglosan estos objetivos en pasos medibles, respondiendo “¿Cómo sabremos si estamos progresando?”.
- Acción clave: Son entradas directas y tareas pendientes, el camino que tendremos que seguir para conseguir los resultados clave establecidos “¿Cómo vamos a conseguirlo?”
La transparencia es crucial; los OKR deben ser visibles en toda la organización para garantizar la alineación, fomentar la rendición de cuentas y promover la colaboración.
Cuidado: Los OKRs no son KPI
Los OKRs establecen objetivos ambiciosos e impulsan el cambio estratégico, centrándose en lo que la organización pretende conseguir y en cómo lograrlo. Constan de objetivos cualitativos y resultados clave cuantitativos. Los OKR son dinámicos, están diseñados para ser ambiciosos y pueden ajustarse a medida que cambian las prioridades.
Los KPI miden el rendimiento continuo y la eficiencia operativa, haciendo un seguimiento de actividades o procesos específicos. Son métricas cuantitativas que proporcionan puntos de referencia para la medición del rendimiento, ofreciendo una visión a largo plazo del rendimiento. A diferencia de los OKR, los KPI son estables y consistentes en el tiempo, manteniendo la salud operativa en lugar de impulsar el cambio estratégico.
¿Cómo hacer el seguimiento?
Las revisiones periódicas, como las reuniones semanales o quincenales, son vitales para supervisar el progreso de los OKR. Estas reuniones garantizan que todo el mundo siga por el buen camino y ofrecen un espacio para resolver problemas. Normalmente las llamamos PPP (Planes, Progresos y Problemas). Esta reunión tiene que ser muy ágil, y debe tener una duración máxima de 20 minutos.
Las revisiones trimestrales son esenciales para evaluar el progreso hacia los OKR. En el ecosistema de las startups, como el contexto y las condiciones pueden cambiar fácilmente, normalmente definimos objetivos trimestrales. Así que esta reunión es realmente importante para analizar cómo ha sido nuestro rendimiento y definir nuevos objetivos. Su duración suele ser más prolongada, con una duración máxima recomendada de 60 minutos.
El feedback continuo es crucial para mantener a los equipos motivados y centrados. Los líderes deben ofrecer comentarios constructivos y reconocer los logros para fomentar el progreso continuo. Los circuitos de retroalimentación fomentan una cultura de mejora y aprendizaje continuos, impulsando el éxito sostenido.
¿Cuánto tiempo tenemos para hacer un seguimiento de nuestros objetivos?
Como ya sabes, en el ecosistema de las startups, es fundamental mantenerse adaptable y ajustar la frecuencia de los ciclos de OKR en función de tus necesidades y dinámicas únicas. Algunas startups pueden beneficiarse de ciclos mensuales más cortos, especialmente en entornos que cambian rápidamente. La flexibilidad en la duración del ciclo ayuda a responder a las nuevas oportunidades y retos con mayor eficacia.
Por eso, aunque recomiendo establecer ciclos trimestrales, el seguimiento continuo a través de los regular check-ins y el ajuste de OKRs son esenciales.
¿Qué plataformas debemos utilizar para hacer el seguimiento?
Existen varias soluciones de software que ayudan a realizar un seguimiento eficaz de los OKR. Las opciones más populares incluyen:
- Google Sheets: Como todos sabéis, es una opción de seguimiento manual flexible y rentable, que permite personalizar y compartir fácilmente entre los miembros del equipo.
- Asana: Integra la fijación de objetivos con la gestión de tareas, garantizando la alineación entre las actividades diarias y los objetivos estratégicos.
- BetterWorks: Simplifica la gestión del rendimiento, fomentando una mayor eficacia de los gestores, un mayor compromiso de los empleados y una toma de decisiones inteligente para los líderes de RRHH y las organizaciones.
- Weekdone: Plataforma fácil de usar que facilita la alineación con los objetivos de la empresa, con check-ins semanales y actualizaciones de progreso.
- WorkBoard: Ayuda a las organizaciones a alinear, localizar y medir los Objetivos y Resultados Clave (OKRs) en toda la empresa.
Eso sería todo por hoy, comunidad, espero que este artículo os ayude a evitar los errores más comunes a la hora de utilizar OKRs en vuestra startup. Si queréis contactar con nosotros para cualquier duda o deseo, simplemente podéis hacerlo a través de este enlace.
¡Nos vemos por aquí!